El día 2 cambié las zapatillas por la bicicleta, más por obligación que por ganas, la verdad eran muy pocas y se comprueba los escasos kilómetros que realicé, nada más y nada menos que 38.7 km. en 1 hora y 27 min. a una velocidad media de 28 km/h.
Llegó el sábado y había quedado con mi cuñado Luis, iba a ser su primera salida después de un mes por problemas de salud, pero al final por culpa de un loro, si...digo bien...por culpa de un loro no pudo salir, pero ya que estaba cambiado me puse en marcha y en el Puente de Santa María me encontré a Antonio Córdoba que estaba esperando a Rasero, así que los tres íbamos hacer las Tres Ermitas.
La primera por la sierra, la Ermita de la Esperanza, a un ritmo tranquilo y hablando mucho, señal que el esfuerzo no era excesivo, teniendo las pulsaciones más bien bajas, pero la felicidad y el buen rollo termina pronto, solo ver las primeras rampas del Mojón, aunque el ritmo no era muy rápido, las conversaciones las íbamos dejando apartadas ya que la respiración se iba convirtiendo más fatigosa.
Hasta el cruce de Los Pelaos, los tres juntos pero poco a poco Antonio iba poniendo su clase y su poderío...como está el tío...hay que verlo como sube, cada vez que se ponía de pie en la bici te sacaba cinco metros y yo aguantándolo como podía tirando de riñones, pero tanto es la cadencia que pone que a 3 km. de lo alto me dejó definitivamente, teniéndolo siempre a 100 metros, aumentando la distancia en el último kilómetro y un poquito detrás subió Rasero, felicitándole también ya que el tío lleva un 39 de plato, al final segunda Ermita realizada.
El calor apretaba de lo lindo pero aún nos quedaba la tercera Ermita, la de Lucena, fuimos por la carretera que nos lleva a Los Llanos de Don Juan, una carretera sinuosa y con algún que otro repecho, muy bonita. Llegando a Lucena pudimos observar que los lucentinos estaban celebrando la romería de la Virgen de Araceli así que religiosamente empezamos a subir, la primera rampa, hasta la fuente mortal, donde Antonio Córdoba seguía intratable y nos dejó atrás, después del descansillo, la siguiente rampa igual de dura, donde el que suscribe petó, marchándose hacia delante Rasero.
Personalmente iba muerto, así que el resto de la subida, la carretera de la Ermita en sí, subí muy tranquilo sin gastar mucho ya que la lucecita de la reserva del depósito se me encendió.
Después de todo conseguimos las Tres Ermitas, aunque todavía quedaba Camarata, Col de la Fuente de la Higuera y el Col de Alipen...y todo esto con un calor....
Al final 110.1 km. en las piernas en 4 h. 30m, quemando 2.794 calorías y 135 pulsaciones de media, os dejo el perfil que saqué gracias al Sports Tracker:
Después del palizón del sábado anterior, una semana sabática, moviendo nuevamente el corazón el viernes día 10 donde la carrera fue nuevamente mi aliada, 7 km. en 38'38'' a 5'27'' el Km.
Sin pasar mucho el tiempo el sábado y esta vez con mi cuñado Luis y el Congui íbamos a realizar un recorrido guapo, guapo, guapo...primero atravesamos la sierra montillana para llegar a Cabra, subir el Puerto del Mojón y dejarnos caer por la otra cara hasta el cruce de Luque, seguimos por esa carretera donde el primer repecho nos espera con una señal marcando el 15%, corto pero agarra que no veas...lo impresionante las vistas de la sudbética, llegamos a Zagrillas Alta donde te dejas caer para llegar a la localidad del Esparragal y es aquí donde los sentidos están en todo su esplendor, no perdiendo ningún detalle del paisaje que se abre a nuestros ojos, lástima que no me paré hacer ninguna foto.
Los últimos 9 kilómetros para llegar a Luque con constantes y duras subidas, carretera auténtica para disfrutar de este deporte, una vez en Luque y reponer fuerzas, cogimos dirección Zuheros por la carretera no menos preciosa que la anterior, una auténtica cuerda colgada de la montaña que vas bordeando hasta que llegas a Doña Mencía. En este punto y hasta La Valeriana íbamos a 50 km/h, llegando a Nueva Carteya con una media de 29 km/h, bajando la velocidad y el ritmo hasta Montilla, donde el último tramo nos lo tomamos con mucha filosofía, en definitiva otros 108.6 km para la estadística en 3 h. 54m. gastando 2,545 calorías y manteniendo 133 pulsaciones de media.
El día 13, tocó correr, 10 km en 55' 12'' a 5'50'' el km. con mi buen amigo y compañero Rafa.
Al día siguiente cambié la flaca por la bicicleta de las ruedas gordas, junto al Pollo y Rafalín nos dimos un "tute" de casi 5 horas, 72.9 km en Mountain Bike, son muchos kilómetros.La Ruta hasta Cabra venga subir y bajar, primero Cuesta Blanca, después la cuesta de los Perros para seguir y salir por el Corneta, tras rodar entre olivos y gracias al GPS de Rafalín porque si no todavía podríamos estar dando vueltas entre los olivos.
Destacar los dos últimos repechos, que digo yo repechones antes de llegar a la Vía de Verde de Cabra, que el que suscribe en ambos tuvo que poner pie al suelo, eso es inhumano...
Tras reponer fuerzas en la Estación de Cabra y hasta Montilla el terreno más favorable con alguna que otra subida pero siempre por pista y bastante asequible.
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| El Pollo y Rafalín |
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| Estación de Cabra-Vía Verde |
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