martes, 15 de enero de 2013

Senderismo de Batalla

El sábado anterior nos fuimos de Batalla, si...lo que oís...a la Batalla de Munda, esta vez nada de correr y sufrir por esos repechos duros que hay en la campiñuela montillana.

Gracias al grupo Senderismo Amanecer íbamos a realizar el recorrido del cross, andando, disfrutando del entorno, así que junto a mi mujer Yolanda y 40 personas más nos dimos cita en el punto de salida, en las puertas del Gambrinus, lugar de reunión en estos últimos meses.

Todo empezó muy pronto, a las 7 de la mañana dimos pistoletazo, noche cerrada, no se veía nada de nada, menos mal que algún senderista llevaba luz, sorprendente la lámpara de Lorenzo...uff..parecía un foco.

Al principio con bastante frío íbamos dando los primeros pasos, pasando por la fuente El Álamo y aunque no se veía, os aseguro que estaba ahí, a buen ritmo y charlando entre amigos, sin darnos cuenta llegamos a la primera subida, el Cerro Humo, menos mal que no había llovido porque el terreno estaba para embarrarse con cuatro gotas.

En primera linea Cobos y Vila

 
 
Y haciendo honor a Senderismo Amanecer, amaneció, precioso el color rojizo del cielo entre las pocas nubes que se asomaban a despertarnos de nuestro estupor.
 
Nosotros seguíamos conquistando lugares andando, poco a poco íbamos devorando los kilómetros, hablando, viendo el paisaje y disfrutando del silencio de la naturaleza.
 
Llegamos al lugar estrella del día, la mole de piedra que se levanta en medio de la campiña, amo y señor del lugar y que todos los montillanos ven pero no conocen...en ese momento me llegan recuerdos de niño cuando entre los amigos, con  nuestras bicicletas "torrox", "GT" y el más atrevido con su "BH", llegábamos a esa mole de piedra, llamada Piedra Luenga, para subirnos en ella y jugar como si fuera nuestra...un lugar con encanto y sobre todo con muchos recuerdos.
 
  



Continuando con la marcheta, llegamos a la fuente Martín Duelamo, donde tocó descansar y dar buena cuenta de la comida...sorprende que esta fuente esté abandonada, sin agua y deteriorada, cuando la misma es un poco de historia de Montilla, solo decir que es un lugar precioso y que la fuente Martín Duelamo fue construida nada más y nada menos que en 1.874 cuando era alcalde Diego de Agustín Alvear y Castilla...uf...¡aquí huele a historia !


 
 
 
Tras la foto de familia ( que no tengo ), continuamos nuestro camino, hasta llegar a los últimos 4 km. duros, primeramente la subida al Cerro Toro y después todo para arriba hasta Montilla y sin darnos cuenta el ritmo se aumentó considerablemente, poco a poco se iban haciendo grupos, teniendo que parar para reagruparnos.
 
Al final 19,20 km. realizados en 3 horas 42 minutos, muy buena ruta de senderismo con muy buena compañía.


 
                                     
 
PD: Mi agradecimiento al grupo de Senderismo Amanecer por su buen hacer.

2 comentarios:

  1. Una buena mañaña de senderismo y mas aún si se hace en buena compañia.
    Muy buena descripcion del dia.

    ResponderEliminar