domingo, 16 de diciembre de 2012

I Quincena de diciembre

Los primeros quince días han sido productivos y bastante buenos, no se si para mejorar deportivamente, pero sí, para que interiormente mi cuerpo y mi mente se sientan libres y sanos...

Ha habido de todo un poco, correr, bicicleta de montaña y bicicleta de carretera, primeramente empezaré por el deporte de las zapatillas:

El día 3, junto a mi mujer Yolanda, y a trote, despacito, nos hicimos 5,02 km. en 39:24 minutos a un ritmo de 7:51 min/km...el que lo lea dirá que iríamos andando, pero es todo un reto para mi mujer correr esa distancia sin pararse, poco a poco, piedra a piedra, se consiguen grandes retos y va por el buen camino.

El miercoles nuevamente junto a mi mujer aumentamos la distancia un poco, esta vez nos salieron 5,63 Km, realizados en 44:37 minutos, manteniendo el ritmo del día anterior, es decir, a 7:55 min/km, de nuevo, sorprendido por el aguante de mi mujer.

El día 8, sábado, poco más voy a decir, ya que lo escribí en la entrada anterior, solamente mencionar que el cross Batalla de Munda, va a ser una gran guerra, y no solo entre mundanos locales, sino entre guerreros de toda España, espero que el 3 de febrero de 2013, todo salga a pedir de boca, y que los guerreros que participemos, nos juntemos en la cantina, una vez terminada.

El día 14, fueron 9 km. que me sabieron a gloria, bastante bien, fue un recorrido por las calles de Montilla, tardando 51:07 minutos a una velocidad media de 5:40 min/km.

El domingo y con el tiempo lluvioso, me fui al gimnasio, donde la cinta me estaba esperando, como se suda en ese invento infernal...ufff...10 km. en 53:09 minutos, a un ritmo medio de 5:18 min/km, que "pechá" de sudar, tremendo.

Pasando a la bicicleta de carretera, no es que le haya dado mucha batalla...solo cuento una salida, el lunes 10 de diciembre, recorrido típico a estas alturas del año, es decir, Fernan Núñez y vuelta, un total de 33,87 km...que...en definitiva, todo lo que sea sumar, bueno para las piernas.

Con la bici de montaña, dos salidas, la primera ya contada y narrada en la anterior entrada y la segunda salida, el miercoles día 12...que barbaridad....llegué a mi casa con un dolor de piernas impresionante...

Todo empezó a las 09:30 horas en el bar del Carrasquilla, con su dueño, mi hermano Antonio, Paulo, Zafra, Rafa y Javi, nos pegamos un calentón de narices, primeramente y para ir entrando en calor poco a poco, cogimos el camino de la fuente del Caño, para llegar al camino de los chinos, girar a la izquierda y llegar a la vereda de Monturque-Espejo. Tras girar nuevamente a la izquierda, entre olivos, íbamos zigzagueando y subiendo poquito a poco, muy llevadero, hasta llegar al camino Garbanceros y de ahí hasta Nueva Carteya, donde íba a empezar el infierno.

Tras rodar paralelo al arroyo, empezaba una subida, de escándalo, impresionante, cuyo nombre ni lo se ni me lo quiero aprender...¡ Dios santo !...que rampa...teniendo que parar en el descansillo, que solo era eso un descansillo porque la subida seguía para arriba, menos mal que los últimos metros estaban hormigonados.

La primera rampa, aguantamos encima de la bici Paulo y el que suscribe, teniendo que poner pie a tierra el resto, incluso Carrasquilla...el tío más fuerte..de todos los que íbamos, con el consiguiente "recochineo" del biker que lleva una Giant...¿ Quién será?.

Paulo y Carrasquilla viéndole el trasero

junto a Carrasquilla

Antonio Zafra

mi hermano Antonio


Tras la primera subida llegamos al Refugio de San Antonio, para rodar por un camino donde el barro se agarraba de lo lindo, para ir directamente al segundo plato fuerte del día, el "Padre Nuestro", hay que ver como se agarra la subidita y eso que es hormigonada...no podría decir el porcentaje de la misma, pero calculo que un 25% mínimo tiene.

Tras bajar y llanear un poco, la tercera subida del día, "la caja de cervezas", decir que la misma está hormigonada, toda excepto los últimos 200 metros, no tan dura como las anteriores...pero...también se suda de lo lindo, una vez arriba, no te puedes ir, sin visitar la Virgen del "Pincho", para rezarle que nos ayude en lo que queda y bendiga a todos los ciclistas de España..."Vasta ya de atropellos".




Una vez retomada las fuerzas y comer un poquito, tocaba bajar para ir soltando piernas e ir pensando en la última subida del día, el "zig zag" junto a la "L", y llegó, vaya si llegó, parecía que nunca iba a llegar, pero sí, estaba delante nuestra y poquito a poco, con plato pequeño y "to" metío para arriba, personalmente lo súbí muy bien y me encontraba con fuerzas y en lo general todos subimos, algunos mejor que otros pero todos le echamos "huev....o....s", y es que, ningún camino por duro y empinado que esté nos va a tumbar...¡ válgame Dios !







Solo tocaba bajar por Cuesta Blanca y llegar a Montilla por carretera y no machacar más nuestras cansadas y sufridas piernas, en resumen, un día genial entre amigos, buena compañía  y buena gente, donde lo pasamos de miedo, risas va y risas viene y así los 44,70 km. encima de la bici se pasaron en un suspiro, mejor dicho en 3 horas 11 minutos.

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