jueves, 22 de septiembre de 2011

3ª Maratón MTB de la Subbetica "Ciudad de Priego"

Una marcha más que he incluido en el baúl de las más duras que he realizado.

Con toda la ilusión del mundo y con ganas de hacer una prueba decente, teniendo un pronóstico de tiempo de llegada en mi mente, llegué a Priego de Córdoba, pero no iba solo, cuatro montillanos más se apuntaron a la odisea de rodar por la desconocida Subbética cordobesa, Antonio Tejada, Carlos Gracia, Ignacio Marques y Benjamín, cada uno con suertes diferentes y dispares afrontamos una gran y dura, dura prueba, siendo el peor parado Benjamín que se cayó y se dio con una piedra en el pecho, teniendo que retirarse, más por precaución que por la gravedad de las heridas.

junto a Carlos y Antonio Tejada

perfil de la prueba
Como veréis el perfil, lo dice todo, 65 km. de recorrido, pasando tres puertos de montaña, el Puerto Mahina, el Puerto Cerezo y las Buitreras, pero eso no era todo, un terreno con constantes repechos muy duros y mantenidos, trialeras de bajadas impresionantes y muy técnicas con los caminos repletos de piedra y gravilla que hacía que la rueda votase más de la cuenta con el consiguiente respeto y miedo a no dar con unos maltrechos huesos en el suelo, todo esto metido en un mismo conjunto salieron 2.245 mts. de desnivel acumulado...!guau...!

Salimos 150 bikers, donde había mucho nivel, destacando Alberto Molina un junior del Andalucía-Caja Granada, Daniel Bernal del Scott-Sportbike y ganador de la prueba con 03:04:49 h., Antonio Pérez, campeón de España de Master-30 y  Jose Urea del Ciudad de Jaén. La salida como siempre a toda pastilla por un camino con numerosos repechos, un sube y baja constante con alguna cuesta más larga y continuada...pero...el infierno empezó pronto, al pasar un cortijo, cuyo nombre no puedo acordarme, el camino, por decir algo, se empinaba endiabladamente, entre olivos, la bicicleta difícil de mantenerla en pie, pero la sorpresa llegaba cuando cogimos un senderito teniendo que poner pie al suelo y empezar a andar, 1.5 km. andando, todo el mundo en fila india, así llegamos al primer collado, Puerto Mahina ya estaba en la mochila. A estas alturas llevaba 13 km. y las pulsaciones no bajaban de 180.

Si la subida fue tremenda...que decir de la bajada...una trialera muy complicada, teniendo que poner más de una vez el pie en la tierra y donde los matorrales bajos me firmaron en ambas piernas, con todo esto íbamos camino del coloso  Puerto del Cerezo.

Una subida larga, muya larga con rampas duras, porcentajes muy elevados, no me canso de decir las piedras que había,  no dejando descansar los brazos en  ningún momento, no teniendo oportunidad ni de comer o te parabas o no comías, poco a poco subíamos El Cerezo, muy bonito curvas de herradura, precioso, las vistas que se divisaban eran fascinantes...pero la fatiga..se estaba apoderando de mí poco a poco, sudaba mucho y notaba que el hombre del mazo, podría estar escondido en alguna curva esperándome.
Con mi fatiga coroné el Puerto del Cerezo, a 1.351 mts. de altitud, tocaba la bajada, igualmente de peligrosa y bonita a la vez...que pena el no saber descender bien.

Pto. del Cerezo
Una vez abajo, beber y beber, comer y comer, el calor apretaba de lo lindo, rodábamos por el único tramo llano de la prueba, pero pronto iba a cambiar, desvío por el camino de la derecha, creo que la llaman la subida del Queso...y dios santo...mete hierro que no subes...nuevamente otro camino con numerosos repechos, cortos pero duros, hasta llegar a Carcabuey y desde ahí dirigirnos a la última subida, las Buitreras.

Subida por pista...igualmente lleno de piedras, subir y subir, no parábamos de subir, interminable se me hizo, no veía el final y es que el cansancio se había apoderado de mi cuerpo, una subida de 7 km. aproximadamente con algún que otro descansillo, pasando al lado de los Buitres, los cuales estaban expectantes a que alguno desfalleciera, adelantando en este punto a Ignacio, que había pinchado, uno de los tres que le quedaban por arreglar.

Una vez coronado, 15 km. para meta, desvío a la izquierda dirección a Zagrillas, no llevaba agua, pero un biker me dio una poca, cosa que le agradecí mucho.



Este tramo, uno de los más bonitos del día, por un sendero...mejor dicho...por un camino de cabras rodaba...mejor dicho...saltaba la bicicleta, con sus repechos incluidos algunos mantenidos y continuos, hasta que llegamos al descenso...por dios...como vamos a baja por ahí, menuda trialera, estrecho, complicada y muy peligrosa, no más ancha que la bicicleta, ni decir que algún tramo realicé a pie y aún así estuve a punto de caerme.

Terminado ese descenso criminal, se abría bastante el camino, pero muy empinado para abajo y mucha piedra suelta, entre los olivos, parecía un cortafuegos, esta sí iba montado en la bici...y faltó un pelo para comerme un muro de piedra, no había frenos para detener la bici, al final me salvé como pude, un descenso para biker con mucha técnica.

Llegada al avituallamiento, me dicen que me queda 8 km. y solamente un repecho duro, menos mal porque estaba en la reserva y me quedaba poca gasolina, seguía sudando mucho, que calor...

Que gracia me dio cuando vi el repecho, 200 metros de escalada, se me habían olvidado las cuerdas para subir...¿ que es esto ?...subí hasta la mitad, el corazón se me salió y no lo pisé de milagro, costaba subirlo andando, una autentica pared, pero eso sí, terminado esta subida y alguna emboscada más llegué a la meta, al punto de inicio, con más miseria que gloria, con ganas de colgar la bici durante un tiempo, prueba terminada y como dije al principio una de las más duras que he realizado.

Llegando a meta
Aunque los tiempos no son lo importante, tardé la friolera de 04:42:55 minutos, acabando en la posición 95 y décimo en la categoría de cicloturismo quemando 4.100 calorías y 164 pulsaciones de media.
Ignacio, cinco puestos detrás mía con 04:56:47 y justamente detrás, Antonio Tejada en 04:58:49, todos orgullosos y con la misma cara de sufrimiento.
Mención aparte fue Carlos Gracia, el tío se salió, 03:56:21 minutos, terminando en un merecido 44 puesto de la general y quinto en Master-40

PD: El único pego de la marcha, los avituallamiento un poco escasos.

viernes, 16 de septiembre de 2011

Primera Quincena de Septiembre

Que cambio al mes anterior, 641 km. recorridos en 15 días, más que en todo el mes de agosto, todo ello en nueve salidas con ambas bicicletas.

No hice esperar mucho que pasasen los días y lo mejor de todo que mi cuñado Luis, se está encontrando mejor y va saliendo poco a poco, así que el mismo día 1 de septiembre, nos hicimos 52.7 km. en 2 horas, recorrido para hacer ganas, ir a Montemayor por el campo de tiro, Fernan Núñez, la Rambla  y para Montilla.

El Sábado, día 3, íbamos a buscar a mi cuñado Manolo, el cual salía desde Granada en bicicleta, así que Luis y yo, por la sierra, dirección Cabra, para subir el Mojón y llegar hasta Priego, por donde venía Manolo, juntándonos a la entrada de Priego. A la vuelta Manolo venía lógicamente más cansado y en la subida al Puerto del Mojón se notó, quedándose un poco, pero al final llegó bastante entero a Montilla, saliéndole 135 km desde la puerta de su casa, nosotros en total fueron 95.7 km, dejando muchas calorías por el camino, 2.365 pero manteniendo unas pulsaciones medias de 130, perfectas para ir cogiendo ritmo siendo el día  estupendo para coger la bici, nublado, aunque nos llovió un poco, pero repito, el día genial.

Al día siguiente y como he explicado en una entrada diferente, participé en la I Marcha BTT "Villa de Montemayor", donde pedaleamos 55 km por los caminos de nuestra campiña.

Subiendo San Carlos

llegando a Montemayor

El martes día 06, nuevamente con Luis, íbamos a subir la Ermita de Lucena y eso hicimos. La subida la afrontamos por la otra carretera, la del Cristo Rey, tranquilos y a un ritmo llevadero, subiendo los dos juntos, sin llegar a pegarnos ningún palizón, la vuelta como siempre por Camarata que siempre parece un coloso de los Pirineos, lo más importante es que otros 84.1 km. más en las piernas en 3 horas 29 minutos.

Dos días después nos fuimos a saludar a nuestra ciudad califal , Córdoba, sacando una media de ida de 31.5 km/h, claro está el aire a favor nos llevaba en volandas, nada que comparar a la vuelta, con el aire de cara, por eso decidimos coger dirección a Fernan Núñez, quitarnos un poco el aire y así hacer más kilómetros. Al final en las puertas de Montilla, la media fue bastante buena, 27.6 km/h en 93 km hechos en 3 horas y 26 minutos, en los datos personales siempre manteniendo una buena media de pulsaciones, 140 para quemar 2.214 calorías.

El sábado día 10, salí con la bicicleta de Mountain Bike, junto a Rafalín y Jose "el montalbeño", decir primeramente como anda el tío éste...parecía un gato...subiendo, bajando, llaneando, daba igual la dificultad del terreno, impresionante.
Iba con mucha precaución, porque sabía que estos dos me iban a pegar una paliza de escándalo y así fue, los primeros 25 km, por Cañaderma, descansadero de Jarata, Fuente Marcelo, Laguna Zoña, Aguilar, llevábamos una media de 21 km/h, a toda pastilla y eso que decían que lo duro estaba por llegar y que razón tenían...cogimos dirección a la Sierra de Montilla, subiendo por el camino de Santa Brigida desde la carretera de La Vereda para llegar a la carretera del 16% y es aquí cuando Rafalín preguntó ¿conocéis el Cerro Madrid?...pues no...Dios santo tendríamos que haber dicho que sí.
Cogimos un camino y ya desde abajo se veían las rampas entre los olivos empinadas hasta el cielo, 800 metros aproximadamente pero curva tras curva de herradura con porcentajes del 20%, bajando un poco en la curva...que suplicio...en la primera rampa tuve que poner pie al suelo ya que la bicicleta parecía un caballo sin domar, una vez en la cima nos sentamos a descansar, comer y beber agua, ya que el sol estaba apretando también de lo lindo...pero...si subir era duro...bajar...los primeros metros sin ver ningún camino y después con el camino repleto de piedras sueltas, había que bajar con mucha precaución.
                       
Menos mal que después del sofocón, nos relajamos un poco y Rafalín conocedor de la sierra montillana muy bien, me enseñó el arroyo Rigüelo, como salía el agua de las rocas, dejamos las bicicletas y fuimos andando por el cauce del arroyo, precioso y muy bonito.


junto a Rafalín y Jose



Arroyo Rigüelo


Arroyo Rigüelo

Después de deleitarnos con el lugar, aún nos quedaba, según Rafalín dos repechos...y que dos repechos...el primero pie al suelo y el segundo parecía una pared, ¿donde encontrará el tío este estos caminos?. Después de sudar bien el maillot, para Montilla por La Vereda, no sin antes subir el Cerro Humo, menos mal que las dos cervecitas que me bebí cuando llegué me dieron fuerzas para llegar a mi casa. 66.3 km muy completos, en 3 horas 48 m, terminando con 17 km/h de media y 142 pulsaciones, tanto fue el desgaste que quemé 2.559 calorías, un día para recordar.

perfil del recorrido, 1.665 de desnivel acumulado
Después de la paliza del sábado, el domingo con la Peña Cicloturista Montillana, nos fuimos a subir el Santuario de la Virgen de la Cabeza, Andujar, expuesto el relato en otra entrada, solo voy a decir que fueron 85.9 km preciosos y disfrutando de verdad de la bicicleta.

Empezando la subida

Las dos últimas salidas de esta quincena fueron el miércoles donde rodé un poco, llegando a Fernan Núñez y vuelta, para hacer un total de 32.6 km a una velocidad de 30 km/h, decir como soplaba el aire de cara de vuelta a Montilla y la otra al día siguiente donde me acerqué a Baena y volver por el mismo sitio, para hacer un total de 75.7 km en 2h 35 minutos a 29,4 km/h, apretando el sol de lo lindo, esperemos que bajen las temperaturas pronto.

lunes, 12 de septiembre de 2011

Subida al Santuario de la Virgen de la Cabeza

Nueva salida con la Peña Cicloturista Montillana a tierras de Jaén, más concretamente a Andujar, su Sierra y su Virgen, donde tras 85 km. aproximadamente de preciosos parajes íbamos a coronar el Santuario de la Virgen de la Cabeza.

Todo empezó en el Centro de Interpretación del Lince, cerca de Cardeña, animal protegido y muy valorado en estas tierras, siendo mejor no encontrárselo por precaución a que no le pase nada, porque si no, la única bici que vas hacer es la de spining en la cárcel...

Tras 8 km. de rodar por un terreno llano, rodeado de encinas, llegamos a la Venta del Charco, donde empezaríamos una larga bajada, sinuosa, con numerosas curvas, una carretera preciosa donde todo ciclista disfruta, buen asfalto y estrecha, donde los que saben descender, bajan a tumba abierta.
Llegamos al embalse de Yeguas, yo con una media  de 35 km/h, algunos llegaron con 42 km/h, donde nos reagrupamos los 45 socios que decidimos hacer este precioso recorrido y tras unas fotos de rigor, iniciamos la marcha ya todos agrupados hasta Andujar, pasando por el balneario de Marmolejo, ahora cerrado por las inundaciones y por la localidad de Marmolejo.



Embalse de Yeguas

Rafa Salas

Paco Araque
En Andujar, nueva parada y esta vez para avituallarnos, los típicos cortadillos y un refresco, falta haría, porque desde aquí quedaban 30 km. para conseguir nuestro objetivo, los más duros del día.

Llevábamos en las piernas 50 km. muy tranquilos, con las reservas enteras, pero pronto iba a cambiar el buen rollo que llevábamos, así que iniciando la marcha ya se veía a la gente pendiente y rodando en cabeza, en el primer repecho se cortó el grupo, quedando en cabeza Paco, Ico, Mugli, Eloy, Carlillos y el que suscribe, decir que los 10 primeros kilómetros eran de continuos sube y baja, repecho va y repecho viene, con pequeños descansos, que va mermando las fuerzas y más cuando los mencionados los hicimos a plato, escapándose Paco, aunque manteníamos la distancia de 200 metros aproximadamente.

Posteriormente una bajada de 10 km. preciosa, carretera muy sinuosa donde las curvas eran constantes, lo peor el intenso tráfico que había. Iniciamos la bajada los cinco juntos, pero Ico y Eloy, demostrando su destreza y aprovechando los coches y arriesgando mucho se escaparon, después iba Carlillos, tras él yo y un poquito más atrás el Mugli...como bajaron estos dos y yo que no bajo bien, esta vez me superé a mí mismo, arriesgando también más de la cuenta.

Antes de llegar nuevamente a los últimos 10 km. de subida voy a decir lo bonito del paraje, un encanto de lugar, de un valor ecológico  muy alto y el puente estrecho que pasamos era una pasada, lo malo que no era momento de hacer fotos.

Llegaba la subida final, primero cogí a Carlillos, que iba con un miembro de la Peña Ciclista de Baena, dejándolo, ya que llevaba un ritmo muy bueno y pensando en cazar a Eloy y al Ico, a los cuales veía delante mía, no más de 300 metros por delante, perdiéndose entre las curvas de vez en cuando, después me diría Eloy que se acercaban a la cuneta para que no los viera.

Poco a poco iban pasando los kilómetros y no le daba alcance, siempre a una distancia cerca, pero imposible de alcanzar y eso que de vez en cuando metía el plato, ya que es una subida larga pero con una pendiente asequible, entre el 4% y el 5%, eso sí constante.

Cuando quedaban 3 km. para la llegada, me cogió por detrás el Mugli, que iba como un tiro, suelto de piernas y con un buen golpe de pedal, tras estar conmigo un rato, se fue hacia delante, y como predecía cogió a Eloy y al Ico y según me dijeron, se quedó sin carretera sino Paco, hubiera corrido peligro.

En definitiva, primero llegó Paco, después el Mugli, tras él Ico, Eloy, el que suscribe y el sexto Carlillos y detrás nuestra un rosario de montillanos que dimos un colorido amarillo a estas tierras tan verdes.

Me sorprendió el Santuario, magestuoso recordándome al Rocío y a Lourdes, hay que ver lo que hay montado en la cima, de casas , hoteles, restaurantes...esto en la romería tiene que ser un hervidero.

junto a Eloy y Carlillos

el que suscribe

Sierra Morena



La Virgen

El Santuario


Puerta de acceso al Santuario


PD: Mis felicitaciones a la directiva por elegir un recorrido tan bonito, seguir así y el año que viene más.

lunes, 5 de septiembre de 2011

I Marcha BTT "Villa de Montemayor"

Como quedaba cerca y me lo propuso mi hermano, nos fuimos a Montemayor donde iba a dar cabida una nueva marcha de mountain bike en la campiña, el recorrido transitaba por  caminos de la mencionada Montemayor, Montilla, Espejo y Fernan Núñez y aunque no hay un fuerte desnivel hay suficientes repechos para quedarte sin aire.

Así que unos 140 biker nos juntamos en la salida, destacando entre todos, la presencia del campeón de España de Master-30, Antonio Perez  Marín, y con él un sin fin de montillanos, siendo a la postre el club Montilla MTB el más numeroso.

El que suscribe

mi hermano Antonio
A las 9 se dio la salida, el ritmo bastante bueno por lo que hasta el primer avituallamiento situado en el Km. 18, en Dos Hermanas se hizo bastante rápido, y eso que había algun que otro repecho. Decir que los caminos estaban ciclables al 100%, las lluvias de los días anteriores los había dejado en unas condiciones estupendas y el tiempo acompañó en todo momento.

Tras comer y beber un poquito seguimos la marcha, todos agrupados, pero insisto que a una velocidad crucero bastante buena, rodando en cabeza siempre los mismos, el Marranetes (hermano), Jesús, Gueto, Antonio y alguno más...a estas alturas yo me estaba haciendo mis cálculos de la llegada, ya que en los repechos nos quedábamos alrededor de 30 ciclistas, por lo que en el tramo competitivo de 15 km.
estaría metido, si no pasaba nada, entre esos puestos.

Mi hermano rodó toda la prueba en mitad del grupo, encontrándose físicamente bien y eso es bueno, ya que poco a poco y si la coge, se irá encontrando mejor y podrá estar en el grupo de cabeza, pero esto no tiene misterio, únicamente cogerla mucho.

Tras llegar al segundo avituallamiento, llegaba la hora de la verdad, donde los gallos estaban nerviosos y se colocaron en la primera fila de la salida, algunos con el plato puesto y eso que salíamos en subida y menuda subida, nada más dar la salida, parecíamos motos...aunque el primer repecho, dejó a más de uno con las piernas tiritando, y ese uno era yo, llegué al final del repecho fundido, las piernas como marmolillos, desde ahí continuas bajadas y subidas explosivas, así 15 km. en el que lo dí todo, las pulsaciones no me bajaban de 180, siempre a tope, tirando de plato cuando podía y bajando no con mucha precaución y eso que los caminos había piedras sueltas para llenar un camión.

Llegué a meta fundido, reventado, me faltaba el aire, menos mal que mi familia estaba esperando en la misma pero no podía ni hablar, aún así me alegré mucho al verlos, aunque no pude decírselos en palabras hasta pasados unos minutos.

Al final mi tiempo fue 38:11:66, quedando en la posición  25 de la general y el 11 en la categoría Master-30, mi hermano al final no entró en el tramo competitivo pero la hizo igualmente, así que le doy un 10 por ello, ganando la prueba en 31 minuto y 4 segundos Jesús Cosano y segundo, el montillano Güeto, por media rueda.




Mi reflexión al final fue buena, para no practicar el Mountain Bike asidua mente, terminé con muy buenas sensaciones y lo mejor un día de deporte junto a la familia, ya que al final estuvimos bañándonos en la piscina municipal de Montemayor.

PD: Les doy un 10 a la organización, todo perfecto.